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¿Cómo cuidar y preparar la piel para otoño?
¿Quién no ha notado el efecto rebote en la piel tras el verano? El sol es mucho más perjudicial de lo que crees y por eso, cuidar la piel en otoño con estos consejos debe ser uno de tus imprescindibles de la temporada.
Si también eres fan de la organización, no te puedes perder estos consejos para mantener tu casa ordenada.
Índice
Cuida y prepara tu piel en otoño
Cuidar de tu piel en estos meses del año es un tema que trasciende lo estético. Se trata más bien de un gesto de autocuidado y salud con el que intentamos velar por el buen estado de la piel. Para conseguirlo, conviene consultar con un dermatólogo que nos recomiende un tratamiento adecuado a nuestro tipo de piel. Además existen varios tips más generales que resultan infalibles:
- Limpieza: esta debe ser una constante todos los días del año y lo que debemos hacer en otoño es elegir un limpiador que no nos reseque y que a la vez logre eliminar el exceso de aceite, suciedad y maquillaje.
- Hidratación: intenta que la textura de tu crema hidratante sea más densa en estos meses.
- Exfoliación: una vez a la semana este gesto ayuda a eliminar las células muertas de la piel y a mejorar la renovación celular. Eso sí, intenta hacerlo siempre de forma suave y sin maltratar la piel.
- Protección solar: seguro que ya has leído esto en más de una ocasión pero es tan importante que te lo repetiremos una vez más, ¡el protector solar es uno de los productos antienvejecimiento más efectivos y hay que usarlo todos los días del año!
Cómo cambia tu piel en los meses más fríos
Un cambio de clima lleva consigo una transformación profunda en la piel. Y en el caso del otoño esta viene determinada por las condiciones ambientales frías que van deteriorando progresivamente la piel.
Entre las condiciones que suele presentar la piel se encuentran:
- Irritación: al volverse más sensible, la piel tiende a irritarse como consecuencia del viento o las bajas temperaturas. En estos momentos es importante recurrir a cosméticos muy nutritivos, sin fragancias añadidas y sin alcohol, dos componentes que agravarían la irritación.
- Sequedad: la piel genera humedad de forma natural y con el frío esta se reduce considerablemente. Evítalo con la ayuda de una buena crema hidratante que incluya componentes como el ácido hialurónico en su formulación. Aplícala mañana y noche después de la limpieza del rostro y cuerpo.
- Rosácea: para evitar el enrojecimiento de la piel, no olvides usar protector solar y productos destinados al cuidado de la piel sensible e incluso proteger la piel del rostro con una bufanda.
- Piel apagada: el frío resta luminosidad al rostro por lo que hay intentar evitar los productos con ingredientes agresivos o exfoliantes fuertes, ya que pueden empeorar la sensibilidad de la piel. Elige en su defecto un sérum con vitamina C que ayude a recuperar la luminosidad perdida.
- Labios agrietados: si durante el año es importante usar bálsamo labial, en otoño es, junto a la exfoliación, el mejor aliado contra la sequedad.
- Manos más secas: las manos es una de las zonas del cuerpo que más expuestas suelen estar al frío. Para evitar que se agrieten, usa una crema de manos rica y protectora e intenta llevar guantes para protegerte.
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