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Invernaderos: qué es, tipos y cómo hacer uno
Si nos servimos de la definición que nos da la RAE para entender qué es exactamente un invernadero, obtenemos una respuesta clara y concisa. Recinto en el que se mantienen condiciones ambientales adecuadas para favorecer el cultivo de plantas. Pero lo cierto es que existe todo un mundo en torno a ellos y hoy queremos ayudarte a desgranar al completo su funcionamiento.
Y para que completes el master en botánica, tenemos también la solución para eliminar el pulgón en las plantas así como los mejores tips para cuidar tus plantas de interior.
Características de los invernaderos
La estructura del invernadero siempre va a presentar una cubierta translúcida para permitir que entren los rayos de sol del exterior. Alrededor de 5-6 horas de luz solar es la cantidad recomendada que nuestro cultivo crezca en las mejores condiciones.
Otro factor importantísimo a tener en cuenta es la humedad, que debe estar en torno al 60-70%. Las plantas necesitan una humedad constante pero siempre controlada. Y es que si se superan esos límites podrían producirse plagas.
Por supuesto, también deberemos cuidar aspectos como la temperatura (mínimo 10-15º y no superar nunca los 30º) o la ventilación
Tipos de invernaderos
A lo largo de la historia han existido numerosas tipologías de invernaderos. Unos han ido cayendo en desuso y los más usados actualmente son:
- Invernaderos de cristal: aquí destaca el invernadero tipo venlo, el más utilizado en lugares de climas extremos con bajas temperaturas y pensado para cultivar hortalizas y flores muy delicadas.
- Invernaderos de plástico: esta categoría incluye varias subcategorías:
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- Invernaderos de raspa y amagado
- Invernaderos tipo capilla
- Invernaderos tipo gótico
- Invernaderos tipo asimétrico o tropical
- Invernaderos tipo túnel
- Invernaderos de malla: los invernaderos tipo malla sombra tienen estructuras simples, se adaptan a todo tipo de terrenos y sirven para optimizar el espacio.
Cómo hacer un invernadero
¿Te animas a construir tu propio invernadero casero? Pues bien, el paso 1 va a consistir en elegir cómo quieres que sea. ¿Qué tamaño tendrá?, ¿dónde quieres situarlo exactamente?, ¿qué presupuesto vas a destinar para su desarrollo?, ¿de qué material va a estar hecho?
El siguiente paso se centra en decidir la ubicación, que deberá ser lo más sur posible así tus plantas recibirán la luz solar durante la mañana.
Lo siguiente será asegurarte un buen drenaje, colocándolo en un terreno lo más regular posible. También hay que tener en cuenta que puedas acceder a la electricidad de tu propia casa, por lo que no se recomienda instalarlo muy lejos de la misma.
Como ya tendrás tomadas todas las decisiones en cuanto a tamaño y materiales, toca instalar el sistema de anclaje y acoplan en él la malla que forme la bóveda del invernadero. La estabilidad se la dará el montaje de los listones o los tubos de la estructura.
Una vez que la estructura esté fijada, quedará cubrirla con un plástico especial de invernaderos. Y un tip que marcará la diferencia. El plástico que sobre, puedes enterrarlo en una zanja para tensarlo.
El último paso será adaptar las ventanas y puertas, esenciales para asegurarte la tan deseada buena ventilación.
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