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Factor de protección solar o FPS, ¿Sabes lo que es?
A medida que nos vamos acercando al verano, los días son más calurosos, y el sol pega más fuerte. Es importante protegerse del sol siempre, pero, en esta época, más aún, por lo que no deberías salir de casa sin crema con factor de protección solar. Existen muchos tipos de protectores solares, por lo que puede resultar complicado escoger uno adecuado, de modo que hoy explicaremos qué es el FPS.
Qué significa el factor de protección solar
Cuando vamos a comprar una crema para protegernos del sol, solemos ver que tienen diferentes números de FPS, como el 50, 30 o 20. Sin embargo, a veces, no tenemos muy claro qué significan esos números. Por ese motivo, antes que nada, es importante conocer qué significa el factor de protección solar. Se trata del índice con el que se mide la capacidad de protección de un protector solar para hacer frente a los efectos dañinos de la radiación ultravioleta tipo B sobre nuestra piel (UVB). Este número nos indica, básicamente, cuanto tiempo podemos estar al sol sin sufrir quemaduras solares.
Qué indica el factor de protección solar
El factor de protección solar indica qué fracción de rayos ultravioleta está recibiendo la piel en la que hemos aplicado la protección. Los rayos ultravioletas son los que causan las quemaduras solares.
Si asumimos que hemos aplicado correctamente el protector solar y aplicamos un índice de protección solar 20, 1/20 de los rayos ultravioletas llegarán a nuestra piel. Una persona con la piel clara puede tardar en quemarse al sol unos diez minutos si no se aplica protección. En el caso de aplicar un FPS 20, tardaría 20 veces más o lo que es lo mismo, 200 minutos.
Tipos de protectores solares
Hay dos tipos de protectores solares, los físicos también conocidos como minerales y los químicos.
Los protectores solares físicos son la mejor opción para las personas que tienen la piel sensible. Se encargan de crear una barrera protectora sobre la piel, con la cual, se le protege de los rayos UV. Estos protectores incluyen minerales como el dióxido de titanio o el zinc. Estos protectores son más espesos, lo que hace que no se absorban con facilidad y la piel quede un poco blanquecina.
Por su parte, los protectores solares químicos absorben los rayos UV. Incluyen una gran cantidad de ingredientes activos, como, por ejemplo, oxibenzona, octinoxato o avobenzona. Este tipo de protectores se distribuyen más fácilmente sobre la piel, siendo algunos, incluso, resistentes al agua.
Dejando de lado si el protector solar es físico o químico, quizás también podríamos decir que existen diferentes tipos de protectores dependiendo de su formato, el cual, puede ser en crema, geles, lociones o aerosoles. Dependiendo de tu tipo de piel, de la actividad que vayas a realizar, dónde vayas a aplicarlo o de tus preferencias, quizás te interese más un tipo u otro. Las lociones y aerosoles son más cómodos de aplicar. Sin embargo, la crema da más fiabilidad, pues su textura hace que se vea más y, por lo tanto, se ve dónde la aplicamos.
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